4 de febrero de 2009

2e, EL COCHE ECOLÓGICO DE LA FIRMA APTERA SE PONDRA A LA VENTA EN OCTUBRE




publicado en www.tuexperto.com




A partir del próximo mes de octubre ya será posible disfrutar del Aptera 2e. La popular firma californiana Aptera Motors ha anunciado que su próximo vehículo ecológico se pondrá a la venta en otoño de este mismo año, para todos los ciudadanos de California que quieran hacerse con él.



Justo se anuncia un año después de que comentáramos desde tuexperto la existencia de este modelo como prototipo. El deseado coche, que todavía se encuentra en fase de pre-producción, ya cuenta con 4.000 clientes potenciales que esperan ansiosos su marcha sobre las carreteras.




El 2e promete ser uno de los coches más aerodinámicos del mundo. De hecho, además de ser eléctrico, sólo pesa 772 kilos. A esto, hay que sumarle que puede correr distancias de hasta 100 kilómetros con apenas dos litros de gasolina y aprovechar la energía almacenada en su batería hasta llegar a los 160. Pero todo esto forma parte de la teoría. De momento, los ingenieros han pedido un poco más de tiempo para acabar con tranquilidad el que será uno de los vehículos más impresionantes del año. Y es que sólo hay que observar sus formas.




El caso es que, en la etapa de pre-producción Aptera ya tiene claro que el 2e podrá costar entre 32.000 y 60.000 dólares (entre 25.280 y 47.400 euros al cambio actual). Unos precios que se parecen mucho al de los otros dos vehículos espaciales y ecológicosque Aptera también piensa poner en circulación.

LA ENERGIA SOLAR ES EL FUTURO

Publicado en Ideal.com

La energía solar es el futuro y Almería cuenta con miles de horas de sol, que pueden ser aprovechadas para la producción de una energía. Por este motivo, la Asociación Provincial de Empresarios de Hostelería de Almería (Ashal) firmó ayer un convenio de colaboración con la empresa 9REN España, con el objetivo de impulsar las energías renovables en el sector hotelero y poner en marcha medidas de ahorro y eficiencia energética. Unas medidas que pueden provocar el ahorro de un 60% de energía, por ejemplo, a la hora de calentar el agua que se utiliza en el establecimiento.
Alrededor de un centenar de hoteles de la provincia se podrán beneficiar de este convenio. «Colaboraremos en la racionalización de la energía y las primeras medidas se concretarán en disminuir el consumo de los hoteles», explicó Antonio Martínez, presidente de Ashal.

AUMENTA LA ENERGIA EÓLICA INSTALADA EN LA UE


publicado en Finanzas.com


Bruselas, 2 feb (EFE).- La energía eólica instalada en la UE durante 2008 superó por primera vez la capacidad de producción de los demás tipos de energía, incluida la térmica o la nuclear, anunció hoy la Asociación Europea de la Energía Eólica (EWEA).


Las nuevas instalaciones eólicas representaron el 43 por ciento de la capacidad total de producción eléctrica puesta en marcha durante el año pasado en los Veintisiete países comunitarios.


La potencia eólica instalada en 2008 en la UE ascendió a 8.484 megavatios (MW), seguida por el gas con 6.932 MW, el petróleo (2.495 MW), el carbón (762 MW) y la hidroeléctrica (473 MW).


Así, la capacidad total de producción de energía generada por el viento en Europa es ya de 64.949 MW, lo que representa un incremento del 15 por ciento respecto a 2007.


La producción real podría ascender a 142 teravatios (Twh) anuales, lo que representaría el 4,2 por ciento de la demanda eléctrica de la UE y evitaría la emisión de 108 millones de toneladas de C02 cada año, equivalente a lo que producen más de 50 millones de automóviles.


"Los datos muestran que la eólica es la primera elección indiscutible para Europa en su intento de apostar por una energía limpia, autóctona y renovable", dijo del director ejecutivo de EWEA, Christian Kjaer, en un comunicado.
Por países, Alemania y España continuaron al frente del sector en la Unión Europea durante el año pasado.


Alemania registró un incremento en 1.665 MW de potencia instalada y totaliza 23.309 MW, mientras que en España se instalaron 1.609 MW y la capacidad total asciende a 15.145 MW.


EWEA destaca que países como Francia, Reino Unido e Italia están incrementando su capacidad y, ya son diez los países miembros que tienen más de 1.000 MW de capacidad total instalada.

BASURA ¿una desaprovechada aliada?


en el DÍA MUNDIAL DE LA TIERRA - escrito por Graciela Vera




Desde el año 1970, el 22 de abril (equinoccio de primavera en el hemisferio norte) en muchos países se celebra el Día de la Tierra.


El promotor de esta conmemoración fue el senador norteamericano Gaylord Nelson que a partir del año 1962 realizó una campaña para introducir el tema medioambiental en la agenda política del entonces presidente John F. Kennedy.


A la primera convocatoria respondieron más de veinte millones de terrícolas y desde entonces el conocimiento común de los problemas de la contaminación, la conservación de la biodiversidad y la concienciación del calentamiento global han ido en aumento.


De la bolsa de basura a la lamparilla eléctrica


No todos los desperdicios son desechos inservibles, el 65 por ciento de los que arrojamos a las bolsas de basura doméstica podemos reciclarlos para convertirlos en aliados.


En el lenguaje cotidiano solemos catalogar como basura todo aquello que ha dejado de sernos útiles para nuestros intereses inmediatos.


No producir basura en nuestros hogares es una utopía imposible de alcanzar. Sin embargo los desechos orgánicos aunque nos están asfixiando, podrían no formar parte de ningún problema e incluso ayudarnos.


No todos los gobiernos están concienciados de la necesidad de tratar la basura y darle a cada tipo el uso más adecuado para convertirla en socio favorecedor o, al menos un ente lo más inocuo posible para la vida del planeta.


El reciclaje nos permitirá darle a cada tipo de desperdicio un tratamiento adecuado.


Hay distintas clases de basura y distintas formas de regularlas. En este artículo nos limitaremos a opinar tan sólo sobre los desechos orgánicos, urbanos, ganaderos o agrícolas que son, quizás los de más fácil solución en beneficio del medioambiente.


En los vertederos de basura, comunes a todo el planeta, se producen gases que, debidamente encauzados, pueden transformarse en energía eléctrica que pase a formar parte del sistema de alumbrado de las ciudades y calefacción de nuestros hogares.


La producción de electricidad a partir de energías renovables abre paso a la electricidad generada por gas de vertedero, sin pensar demasiado en costes, representa una opción para que los gobiernos den una solución práctica, rentable y necesaria a buena parte de los dos mil millones de toneladas de basura anual, que ya ahogan al planeta.


Es un proceso que se inicia en la escuela.


No desvariamos al afirmar esto ya que el reciclaje es un aspecto fundamental y así como enseñar a reciclar a quienes ya cargamos décadas de malas costumbres sobre nuestros hombros puede resultar una tarea necesaria pero dificultosa, incrustar en la mente de los más jóvenes la necesidad de darle otra oportunidad a la Tierra, comenzando por hacer útil su basura, puede ser la opción que haga viable el futuro del planeta.


Los defensores y los detractores de la reconversión de la basura en energía mantienen abierta desde hace ya bastante tiempo una discusión que, como tantas otras parece quedar encasillada en términos de bueno y malo sin otorgar opciones intermedias.


No hablamos de un proceso cien por ciento limpio pero puede considerarse un eslabón intermedio que sigue a la energía solar o a la energía eólica en la producción energética basada en métodos renovables y, poniendo pro y contras en la balanza no deja lugar a dudas de su necesidad.


Lo cierto es que esta es una opción en la que poco se podría lograr si no hay una participación de todos; de cada uno de los que generamos esa basura, aprendiendo a reconocerla y a separarla al momento de desecharla.


Del vertedero a la red energética


Así como aprendimos a separar la basura antes de tirarla, es necesario aprender sobre los métodos que permitirán hacer de ella un elemento útil. Los desechos orgánicos y vegetales se utilizarán para producir calor mediante la combustión.


Hablamos de conversión termoquímica que se consigue a través de varias modalidades: pirolisis o sea descomposición térmica de materiales que contienen carbono; hidrogenación que es la obtención de hidrocarburos de desechos orgánicos; hidrogasificación, o sea la obtención de metano y etano al someter a elevadas presiones el estiércol y, por último la fermentación y destilación de la que se obtiene alcohol a partir de granos de de desechos vegetales.


Con las bacterias que requieren oxígeno o bacterias aeróbicas se utiliza la conversión biológica de la que podemos aprovechar el calor.


Como ejemplos podemos tomar el tratamiento de aguas negras y el de fertilizantes que, sometidos a procesos de descomposición producen gas combustible.


La descomposición necesaria para llegar a producir el gas necesario para iniciar el proceso de transformación en energía, demora entre seis y doce meses y se sostiene por muchos años con posibilidades de iluminar muchos hogares y sitios públicos y quizás en un tiempo no muy lejano dar razón a la FAO, organismo que considera factible su utilización para el transporte como substituto de los combustibles fósiles que a más de contaminar demasiado, nadie ignora que el tiempo terminará agotando.


Son razones sencillas, no muchos los gobiernos que operan en este aspecto, y por suerte tanto Uruguay como España lo están haciendo como muchos otros países de América y Europa.


Por todas las posibilidades que se abren y por la concienciación que se está incrementando en este aspecto no creemos desvariar al decir que la basura orgánica puede comenzar a celebrar con nosotros, terrícolas, el Día Mundial de la Tierra y nosotros, terrícolas, poner nuestro esfuerzo para que, dado un fin a éste, otros tipos de desechos no dañen como lo hacen ahora este preciosísimo planeta.



Desde Almería, en el sur del norte, a 25 de abril de 2006

DE QUÉ ECOLOGÍA ME HABLAN


Escrito por Graciela Vera


Hace ya mucho tiempo que dejé de creer en los pseudo ecologistas, que no en la ecología razonable y bien entendida en beneficio del ser humano, el que habitará mañana el planeta Tierra, pero también y priorizándolo quizás egoístamente, pero con sentido práctico de confortable supervivencia, los que hoy llevamos la carga de sostenerla.


La ecología no puede estar en la acera de enfrente del progreso sino sustentándolo para que éste se desarrolle con sentido medioambientalista.


Las organizaciones que se rasgan las vestiduras llevando adelante campañas, algunas veces necesarias pero muchas otras, ideológicamente equivocadas, no representan como creen o, esgrimen audazmente, el sentir de todo el resto de la población, a la que suelen –para justificarse- acusar de insensibilidad.


La prensa suele ser sensacionalista y el sensacionalismo es partidario. ¡Lamentable!, sólo se ve una cara de la moneda pero hay realidades que no dejan de hacerme fruncir el ceño.
Y sin que nadie me de respuestas sigo haciéndome preguntas:
• Una: ¿Los ecologistas ‘de vanguardia’ no trabajan, como lo hace el resto de los mortales? ¡Porque lleva cojones estar al pie del cañón todos y cada uno de los días del año!, si hasta parecen dirigentes gremialistas eximidos de cumplir funciones en sus trabajos habituales.• Y dos: Si me hago ecologista, y redundo, ‘de vanguardia’, porque debe saberse que en la ecología también hay diferente status a los que se llega no por estudios sino por no cuestionar doctrinas, ¿podré viajar por el mundo a expensas de los aportes de socios y benefactores?


Personalmente, y a pesar de considerar que me encuentro en una aceptable condición económica, me es imposible en un año y mucho más aún en pocos meses, estar levantando pancartas en Dinamarca, Irlanda del Norte, Uruguay, México, Canadá, Estados Unidos, España, Chile, Alemania, ríos, montañas, fiordos, o también…. ¡dejémoslo allí!


Creo que me dolerían las tripas si aceptara el donativo ofrecido por la misma multinacional que estoy acusando ¡vaya a saberse por qué mecanismo de dadivoso accionar terminaría aceptándolo! Después de todo eso de ‘a Dios rogando y con el mazo dando’ no deja de estar de actualidad.


Por otra parte viajar es muy contaminante, altamente contraditorio con la ecología salvo que nos desplacemos a pie, a remo o vela, pero generalmente las campañas internacionales se realizan bajando de los aviones, buses o automóviles. Por eso ‘de dinero y santidad, la mitad, de la mitad’.


Creo en la necesidad de tener conciencia ecológica y aplaudo las campañas que se sostienen sobre intereses nítidos y también aplaudo al ecologista que acertadamente o no, cree firmemente en la utilidad de su acción, pero no son todos; en este campo cacarean muchos, pero al separar la cáscara del grano se pierde mucha balumba.


Siempre me he preguntado si se puede detener el progreso que representa bienestar para millones, por un futuro incierto. ¿Quién tiene la certeza de que algo es bueno o malo?, además del Ser Supremo, por supuesto.


No precisamente alguien que pintó desparramando esmalte y contaminando papeles una pancarta sobre cuyo lema debe preguntar el significado, y que repite consignas que más se asemejan a un sutil adiestramiento de masas que a un análisis en profundidad de prós, contras, posibilidades y opciones reales y aplicables.


No basta decir ‘no me gusta’ porque a mi tampoco me gustan algunas cosas, como el poste que sobre un majestuoso cerro contamina el paisaje, pero muchos son los que cuentan con luz en sus hogares gracias a ese poste; no me gustan los lugares donde se utiliza radioactividad pero la radiación cura enfermedades y no sería lógico prohibir su utilización o la del yodo radioactivo y así podría seguir con los sí sobre los no.


Dicen que en nombre de la religión (cualquiera de ellas) se han cometido muchas barbaridades; sería lamentable que en el futuro se repita esta acepción también en nombre de la ecología.


¿Podemos impulsar el odio entre dos países hermanos por un ‘ecológico localismo’ que no resultó más que una fantochada con probados intereses turísticos? Esto sucedió en Uruguay con los autoproclamados ambientalistas entrerrianos.


Sin oir una voz de los abigarrados defensores de la ecología, ni en Uruguay ni en Argentina, ni en España donde el suceso parece ser información tabú, la empresa española productora de celulosa Ence, que ya mostró su ‘valentía’ cuando los ecologistas argentinos amparados por la ingerencia de su presidente ante el de España, lograron que saliera con el rabo entre las piernas, con bravuconadas que sin embargo, no amedrentaron a la paplera finlandesa Botnia, y que sólo cuando pudo comprobar el éxito de ésta, regresó para con el torpe beneplácito del gobierno uruguayo instalarse donde, con total desfachatez e intromisión, se lo señaló el de Argentina.


No hablaremos de la condicionada bendición medioambientalista que podría implicar este silencio, pero sí del desastre ecológico chucutamente callado, vale aclarar que no por todos los grupos ecologistas porque ya he dicho que los hay, con valederos y legítimos intereses por el medioambiente.


La empresa en cuestión taló 80 hectáreas de monte nativo de algarrobos, monte protegido; en su descargo argumentó que por un error en la interpretación de los planos había realizado intervenciones de limpieza en una zona que no le pertenecía, donde crecía, adyacente a sus plantaciones de eucaliptus, el monte en cuestión.


Una de dos: o la empresa no tiene buenos ingenieros, o quizás confundieron a nuestro país con los que aceptaron mucho hacia atrás y más al norte, los espejitos y cuentas de colores.
El gobierno uruguayo ordenó la suspensión temporal de todos los trámites que Ence está gestionando ante la Dirección Forestal para la construcción de su pastera, pero en los hechos, el monte nativo ya ha sido diesmado y no he visto la foto de ningún medioambientalista encadenado a uno de sus árboles ni de una reina semidesnuda paseando carteles.


Tampoco he leído fuera de la prensa uruguaya, ni he visto que los medios ecologistas den cobertura al desagüisado. Pero con seguridad lo harían sin demora si Botnia lanzara una bocanada más de humo que lo habitual, o si el Ministro de Ganadería y Agricultura de Uruguay obligara a los españoles a reforestar la zona talada con ingentes algarrobos y regar ‘con amor’ esas plantaciones hasta que los arbolitos crezcan y den sombra.


Y en esto de la defensa del medioambiente ¿Cómo andamos por la provincia de Almería?


Porque aquí sí que se chilla en nombre de la ecología, pero a la pobrecita se la viste con tanto lastre, que los reclamos ya no engañan más que a los encandilados de siempre.


¿Se puede jugar con el porvenir de pueblos que tendían a desaparecer, por una mal utilizada prepotencia de mando político? Esto sucede en España, con pueblos costeros y serranos de la provincia de Almería y precisamente con aquellos lugares donde el gobierno local no coincide ideológicamente, con el nacional.


La perorata ecológica mal entendida me indigesta, pero cuando se politiliza ya me resulta repugnante.


Almería fue hasta mediados de la última mitad de siglo pasado, una tierra paupérrima a la que las demás provincias menospreciaban llamándola despectivamente, tierra de lagañas y esparto.


Campos secos, sin agua; arena y roca que se transformó en un oasis y la tierra ocre se vistió del blanco de los plásticos que cubren los cada día más tecnificados invernaderos.
Almería ha pasado a estar entre las primeras provincias del país con mayores ingresos per capita.


Fue tierra de emigración y hoy es tierra de inmigración; ofreció mano de obra barata y hoy la solicita.


Pero no es sólo agro. Almería tiene también uno de los paisajes más espectaculares y ambas cosas, progreso agrario y turismo provocan dentera en el resto de la Comunidad.


En Almería el Mediterráneo es más caliente que en otros puntos de Andalucía mejor promocionados turísticamente; en Almería hay una limpidez de atmósfera, 320 días de sol asegurados y un concepto de hospitalidad que podrían catapultarla al primer orden turístico, pero en la realidad y con el aplauso del ecologismo de pacotilla, Almería ha quedado relegada a cotos de tortugas moras, flamencos, matas de esparto y palmas que como la závila y otra flora del lugar son originarias del desierto mexicano, afincada por similitud en este clima tras fortuita y penosa emigración.


Una defensa del medioambiente - que no se practica tan empecinadamente en otros lugares de Andalucía y España en general - ha coartado la superación y bienestar de los almerienses.


• Pueblos a punto de convertirse en fantasmas han resurgido de la mano de los ingleses, nuevos pobladores que traen savia nueva y libras esterlinas para fortalecer la insuficiente economía de esos lugares.


En este tiempo la única diferencia fue la construcción de chalets en las laderas de la montaña (sin quitar belleza a las mismas) que han dado lugar al asentamiento de nuevos habitantes: los ingleses de la España rural de hoy, que buscan integrarse y disfrutar del clima de la provincia.


Pero estas nuevas construcciones como otras en distintos puntos de la provincia están amenazadas de ser derruídas porque, políticamente se buscó a la ecología como excusa y ecológicamente se interpuso la política como fundamento.
La economía de cientos de pueblos españoles en los que ya iban quedando muy pocos habitantes se reflotó con la llegada de los ‘guiris’, inmigrantes dentro de la misma Europa con la diferencia respecto a otros extranjeros, de que llegan atraídos por clima y beneficios médicos pero, trayendo divisas.


Hoy los diarios británicos alertan a los ingleses para que no compren propiedades en España. Y es lógico que no lo hagan cuando su buena fe se ve pisoteada por el Gobierno con acciones que ni siquiera son medidas con igual balanza para todos, sino que la respuesta depende, en buena medida, de si las autoridades del pueblo en cuestión son de la misma orientación política o de la oposición. ¡Lamentable, pobre España y pobre Almería!


• Parques naturales como el parque terrestre y marítimo de Cabo de Gata a 30 kilómetros de la capital, son una joya para el desarrollo turístico. Y hablamos de turismo responsable donde se planifique en sus 12.000 hás más la milla de franja marina cualquier tipo de avance edilicio o amplicación de infraestruturas turísticas que hoy por hoy están vedados.
El parque es disfrutable para unos pocos, porque no todos pueden desplazarse por su extensión como sucede en otros sitios también protegidos ¡y muy bien por cierto!, del planeta.


Y mientras el ecologismo pretende que se crea que se trata de la protección de algunas especies que ni siquiera son autóctonas de la región, poco se hace por salvaguardar las sí amenazadas y difíciles de recuperar, praderas de poseidonea en el Mediterráneo.


Hay lugares de gran belleza paisajísticaque la provincia no puede mostrar a los turistas porque éstos no llegan por falta de infraestructura vial adecuada, servicios en condiciones y, sobre todo, comodidad para poder visitarlos sin tener que ser expertos en trekking o mountain bike.


El turismo no es antiecológico, la falta de planificación lo es y la ecología mal interpretada es sentenciar a mucha gente, a volver a tiempos de pobreza y soledad.
Pienso que si la ecología fuera soledad y el respeto al medioambiente fuera sinónimo de ruina económica, éstos serían nocivos para el planeta y entonces no habría reinvindicaciones.


Pero es todo lo contrario, una y otro son sinónimos de progreso, salvo que nos topemos con los verdaderos depredadores: los levanta pancartas de turno hablando en nombre de fantoches inmorales.



Desde Almería, en el sur del norte, a 21 de agosto de 2008